Un equipo de investigadores afiliados a una gran cantidad de entidades en China ha creado un tipo de limo magnético que se puede configurar sobre la marcha para realizar una variedad de tareas robóticas.
Un equipo de investigadores afiliados a una gran cantidad de entidades en China ha creado un tipo de limo magnético que se puede configurar sobre la marcha para realizar una variedad de tareas robóticas (25 de Marzo de 2022).
En su artículo publicado en la revista Materiales funcionales avanzados, el grupo describe su limo, sus posibles usos y las acciones que han tomado para hacerlo menos tóxico.
En los últimos años, los científicos han desarrollado una variedad de robots blandos destinados a un posible uso en el cuerpo humano como dispositivos terapéuticos.
En este nuevo esfuerzo, los investigadores han agregado a esa lista un tipo de limo que algún día podría usarse para recuperar material tragado accidentalmente o para reparar lesiones internas.
La mayoría de los robots blandos destinados a ser utilizados en el cuerpo son extremadamente pequeños, lo que les permite moverse dentro de las arterias o venas y entrar en los órganos.
Al igual que con otros robots blandos, la aplicación de un campo magnético activa el movimiento. Sin embargo, a diferencia de la mayoría de los otros robots blandos, el mismo campo magnético también se puede usar para cambiar la forma del robot sobre la marcha.
El limo es una mezcla de partículas de imán de neodimio, bórax y alcohol polivinílico. El resultado es una gota marrón oscuro que responde bien a un campo magnético. Usando ese campo, los ingenieros pudieron configurar el robot en un toro, un medio toro, un panqueque, una esfera y una línea recta.
Se demostró que podrían usarse para manipular objetos. El medio toro, por ejemplo, podría usarse para acorralar uno o más objetos y empujarlos en la dirección deseada. E ingeniosamente usaron la forma del panqueque para unir dos pedazos de alambre rodeándolos.
Señalan que se podría usar una técnica similar para envolver un objeto para que se mueva a una ubicación deseada.
Los investigadores también señalan que el limo es tóxico y por lo tanto, no es adecuado para su uso en el cuerpo. Para superar esa limitación, aplicaron un recubrimiento de sílice, que duraría por muy corto tiempo.