Los levantamientos de glúteos brasileños, los vestidos sin espalda con tangas incorporadas y la idolatría interminable del trasero de Kim Kardashian han terminado, parecen haber terminado.
Según la locura de las redes sociales levantada a lo largo de los últimos días por las últimas fotografías de Sydney, parece ser que las mujeres sin demasiado culo aunque con mucho pecho, finalmente pueden dar un suspiro de alivio: ¡Las tetas han vuelto!
Se dice por la red que las chicas, pueden agradecer a Sydney Sweeney gran parte de este boyante regreso. En verdad, las mujeres como Sweeney saben que nunca ha habido una “era” que no sea la era de las tetas.
Sí, el tamaño preciso y las proporciones de la figura femenina “aceptable” cambian con la temporada según el capricho de los editores de revistas y los ejecutivos de publicidad.
Y sí, el voluble péndulo cultural puede oscilar con el lanzamiento de canciones como Baby Got Back p Anaconda de Nicki Minaj, pero una conversación rápida con cualquier hombre de sangre caliente te hará saber todo lo que necesitas para darte cuenta de lo que siempre está de moda.
¿Cómo llegamos al regreso de la moda por los pechos grandes?
Como la última It Girl de Hollywood, Sweeney ha estado haciendo una especie de campaña exuberante durante bastante tiempo.
Irrumpió en escena por primera vez en 2019 interpretando a una adolescente que nadie creía que fuera una adolescente en el éxito hipersexualizado de la escuela secundaria de HBO, Euphoria.
Pero realmente llamó la atención en los últimos años con un papel protagonista en el exitoso debut de The White Lotus, un divertido video musical de los Rolling Stones, además de papeles cinematográficos en Everyone But You y la súper odiada película de superhéroes Madame Web.
Así, una vez más, el mundo se ha unido para estar de acuerdo en que una rubia exuberante es realmente uno de los mejores placeres de la vida, ¿Es esto algo terrible?
Si bien, la impresionante figura de Sydney está pasando por un gran momento (20 millones de seguidores en Instagram y subiendo) es evidente que ella es más que eso.
Su actuación como presentadora del SNL a principios de este mes, fue una prueba positiva de su talento cómico. Pero luego vino la disputa absurda y eclipsadora entre los medios.
Mientras estaba al otro lado del pasillo, la actriz de curvas fue presentada como víctima de la misoginia.
“Sydney Sweeney abraza la mirada masculina”, criticaba un digno titular de Newsweek, añadiendo un poco de jerga que sólo un estudiante de posgrado podría adorar.
El problema es que ninguna de las partes ha comprendido del todo la importancia de este momento cultural, tampoco están prestando mucho servicio a la considerable capacidad intelectual de Sweeney.
De hecho, ¿Por qué todo el mundo está alborotado por un bonito par de pechos? La respuesta está profundamente arraigada en la cultura occidental.
La sexualidad de la mujer se ha utilizado durante mucho tiempo como un palo para golpearla. Es una paradoja cansada y tan antigua como Joe Biden: ¿Demasiado sexy? Eres una puta. ¿Demasiado tapada? Eres frígida.
Susurralo, pero gran parte de esta paliza sobre los senos la realizan otras mujeres a quienes no les gusta ver un escote enemigo ascendiendo en la cadena alimentaria de su lugar de trabajo.
Y ahora, en la última década y con la llegada del gran impulso de las redes sociales, todo parece haberse ido a la mierda.
Hemos visto a las estrellas de portada transformarse desde modelos tetonas con abdominales hasta modelos demasiado grandes, que si bien son una apertura hacía la demostración de que en la sociedad existen personas de todos los tamaños, no son el mejor ejemplo para la salud.
Vogue ahora defiende a estrellas no binarias como Emma Corrin y Sam Smith, ¡Hasta las fajas para senos están más de moda que los senos reales!
La absoluta falta de sexo de esta diatriba liderada por TikTok ha deformado tanto nuestro sentido de la belleza que no es de extrañar que los jóvenes tengan tan poco sexo.
Piénsalo. Cualquier persona menor de 18 años no ha experimentado realmente la belleza clásica de Hollywood en los programas y películas que ve.
Todo esto significa que cuando aparece alguien como Sweeney, gran parte de la sociedad no es capaz de poder creer lo que está viendo.
Sweeney entiende esto y se inclina, incluso ha descrito sus pechos como sus mejores amigos. ¿Puedes culparla? No siempre fue así. Sweeney también ha revelado que alguna vez consideró someterse a una cirugía de reducción de senos.
La propia actriz confesó en una entrevista en Diciembre: “Cuando estaba en la escuela secundaria, solía sentirme incómoda por el tamaño de mis senos y solía decir que cuando cumpliera 18 años me harían una operación de senos para hacerlos más pequeños“.
Gracias a Dios escuchó a su madre, quien le advirtió de que se arrepentiría y ahora la propia Sydney es la que afirma que cuánta razón tenía.
Sweeney ya habló sobre esto antes: “Afortunadamente para mí, cuando estaba en la escuela secundaria rápidamente reconocí que tener senos más grandes era una ventaja y no me quejé más, incluso cuando me metieron en problemas”.
La ropa, por muy conservadora que fuera, a menudo parecía vulgar o demasiado llamativa y los hombres se quedaban mirando. Incluso, un exnovio no muy cariñoso consideró aceptable mostrarles a sus amigos fotografías íntimas de ellos.
Ni que decir que, los cuerpos de las mujeres (con el pecho plano o grande) siempre merecen un respeto.
Pero ciertamente, es refrescante ver a Sweeney elevarse hacia adelante como un símbolo del disfrute descarado y sin preocupaciones por el pudor de la sociedad.
Quizás, este sea el comienzo de una nueva frontera, un silenciamiento de los liberales de cabello azul a quienes les encanta insistir en que la fealdad es elegante o tal vez eso sea, solamente una ilusión óptica temporal.
Esto, por desgracia, solamente el paso del tiempo y el compartamiento de la sociedad en la vida real, las redes sociales, el marketing, la publicidad y las modas.. Lo dictaminarán.