Ethereum es el compilador de contratos digitales más popular del mundo, mantenido por muchos pero propiedad de ninguno.
Quizás uno de los factores más interesantes detrás de su popularidad es el gran futuro que se le presupone.
El ether aspira a transformar los actuales estándares de Internet en cuanto a la propiedad, la creación de valor y lo más importante, la privacidad.
¿Un futuro de Internet transformado?
No solamente las aplicaciones pueden escribirse sobre Ethereum, cualquier objeto digital se ofrece a ello (una imagen, un archivo de música, un video, una receta del pastel de calabaza) y además, se le puede agregar una propiedad exclusiva, una comercialización y un almacenaje, entre otas muchas posibilidades.
Si bien, muchos gurus han predecido que el futuro de Internet sería dividido en diferentes capas y niveles de protección, resulta que, parafraseando a Tim Berners-Lee: “hacer que las tecnologías subyacentes sean accesibles para todos sobrealimenta su adopción y utilidad”.
Ethereum y la aparición de la Web 3.0 pintan un futuro diferente: Una Internet no solamente más privada, si no que también más abierta y transparente por defecto.
La breve historia de Ethereum
En 2013, Vitalik Buterin concibió la idea de Ethereum, que se desarrollaría y desplegaría dos años después.
La plataforma se construyó para permitir que cualquier persona en el mundo con acceso a Internet pueda escribir aplicaciones de forma permanente (conocidas como aplicaciones descentralizadas o dApps) en ella, con las que cualquier otra persona pueda interactuar pero no pueda modificar, básicamente software de código abierto con integridad hasta el enésimo grado.
El pan y la mantequilla de estas aplicaciones se denomina contratos inteligentes: Un contrato digital o intermediario.
Mejor explicado, eso significaría que los servicios financieros y legales ya no requieren un intermediario, los contratos inteligentes procuran ese servicio hacía ambos lados sin la necesidad de un tercero.
El Ethereum básicamente sustituye a un agente de depósitos en garantía, a un notario, a un cajero de banco que verifica tu identificación o a un originador de hipotecas para una transacción digital instantánea.
Esa función invaluable hace de Ethereum una de las criptomonedas y cadenas de bloques más reconocidas que existen enel planeta, dejando a muchos de sus pretendientes detrás.
Los precios de Bitcoin alcanzaron recientemente su máximo histórico y aún así, el auge por Ethereum sigue en pleno apogeo.
La Web 3.0 o el Internet del futuro, perfectamente podría basarse en el uso de las cadenas de bloques de igual a igual para permitir a los usuarios interactuar con los datos, almacenar valores, entidades, etc. y todo ello sin la necesidad de ningún intermediario.
Ethereum hoy
A medida que Ethereum se convierte en una infraestructura subyacente para casos legales, acuerdos financieros, acuerdos vinculantes y mucho más procesos, se comprenderán sus debilidades y fortalezas.
Con lo que con el paso del tiempo, no existe lugar a dudas de que más tarde o más temprano, Ethereum se terminará convirtiendo en un rasgo fundamental a la hora de hablar de la propiedad y la transferencia de propiedades.
Actualizando las palabras de Stephen Hawking sobre la programación “La programación informática básica es una habilidad esencial para aprender”, el comprender los fundamentos de los contratos inteligentes como Ethereum se convertirán en una habilidad legal y financiera básica.
Hoy en día, las aplicaciones con mayor auge de Ethereum son las NFT o tokens no fungibles.
Si bien, las NFT son relativamente nuevas, se están comenzando a poner de moda entre los consumidores y los artistas e inversores lo están aceptando ya como una reserva de valor y como una afirmación de su propiedad digital única.
Las NFT permiten que cualquier cosa digital (cualquier archivo) sea marcado como de tu propiedad/autoría y pueda ser comercializado en Internet, pueso que no se puede manipular, cambiar o copiar (no fungible).
Algunas predicciones para casos de uso de los NFT pueden ser los préstamos hipotecarios, la compra de propiedades, la venta de entradas para eventos, los festivales de música, almacenamiento de archivos y juegos.
Por ejemplo, Axie Infinity, es un testimonio de cómo los jugadores pueden ganarse la vida dignamente en un mundo de juegos basado en NFT.
Las posibilidades son infinitas y la comunidad curiosa y llena de energía lanza nuevas propuestas cada día.
Los desafíos de Ethereum para el mañana
A medida que la regulación se pone al día con el poder de esta tecnología subyacente, muchos se preguntan si veremos grandes intentos de controlarla. Al igual que el debate de hace años en Crypto Wars, lo que implicó solicitudes para comprometer o romper el cifrado.
Los cambios en las afirmaciones de la inmutabilidad de Ethereum podrían comprometer su principal característica valiosa: Su integridad permanente. Podría haber un conflicto potencial entre la inmutabilidad de Ethereum y su adopción generalizada.
Eso podría significar que los reguladores financieros intentarán tomar alguna forma de propiedad o control sobre la implementación.
Y sería gracioso entonces, saber cómo esos futuros reguladores potenciales responderían a la pregunta: ¿Cómo se puede gobernar con cautela una esfera de nodos ampliamente conectada sin comprometer su verdadero valor: La descentralización en sí misma?
Otros desafíos y limitaciones que probablemente enfrentará la tecnología son la sostenibilidad del rendimiento: Las tarifas para construir sobre Ethereum llamadas tarifas de gas han ido aumentado en los últimos años y se sabe que la plataforma está desacelerando el tiempo de procesamiento.
Se cree que Ethereum 2.0 suavizará las ineficiencias, pero ¿Cómo seguir manteniendo la velocidad en una cadena de bloques optimizada para almacenar y calcular todas y cada una de las transacciones?
La seguridad dentro de una cadena de bloques, también sigue siendo un grndioso desafío, ya que existen vulnerabilidades conocidas de Ethereum aunque no sean ampliamente explotadas.
Por ejemplo, Poly Network informó de un hackeo a lo largo de este año que resultó ser una vulnerabilidad entre las llamadas de los contratos.
Los contratos inteligentes son funciones intrincadas y complejas de escribir, por lo que requieren una auditoría en profundidad antes de implementarse en una red.
La seguridad de Ethereum también se basa en criptografía asimétrica sin contraseña, es muy posible que la computación cuántica eventualmente interrumpa nuestros estándares de criptografía asimétrica.
El futuro dirá como se podrán mantener el Ethereum y las cadenas de bloques. Hacia el metaverso y más allá..